Cuando tienes ganas de un apapacho, te vas a visitar a los amigos, esos que están ahí tanto en las buenas como en las malas. Fue entonces que, caminando por Santa María la Rivera, y sin previo aviso, me dirigí al restaurante Xuva para ver si corría con la suerte de toparme con mi gran amigo Juan Aquino, la mente maestra detrás de los fogones de ese lugar.
Una vez ahí, me senté a la mesa con mi hermana Daisy para platicar lo que siempre dejamos pendiente, y que ese día… otra vez sucedió, ya que al leer el menú se nos comenzaba a hacer agua la boca y no sabíamos ni por dónde empezar.
En la mesa contigua estaba el famoso Juan, con un ángel de esos que vienen a la tierra para ayudar. Más tarde, ese ser se marchó, dejando un halo color morado que al final alegró a desconocidos paladares, un postre.
Entre pláticas, risas, abrazos y ojitos Remis, mi hermana y yo, en compañía de Juan, disfrutamos de una espesa crema de zanahoria con tiernas hierbas y verduras veraniegas. El mejor comienzo para apapachar el alma.
A mi hermanita se le antojaron los molotes de plátano rellenos de crema y queso de rancho. Y yo, obvio, iba por tamales de frijol bañados en mole oaxaqueño.
De postre, el helado de frutos rojos me transporto a campos llenos de hermoso gozo. Su sabor refrescante me inyectaba vitalidad, y en cada bocado… nuevos latidos.
No hay mejor final que agradecer con un mezcal, bebida ancestral que en cada trago cuenta historias de cultura y tradición.
Xuva te invita a volver a la tierra y a las raíces; pero, sobretodo, a volver para probar más.
Xuva
Dirección: Salvador Díaz Mirón 128, col. Santa María la Rivera, CDMX
Redes sociales: Xuvarestaurante
Página web: https://xuva.mx