Cuando andes por la zona de Coyoacán en la Ciudad de México y tengas antojo de comida italiana, lo más acertado es sentarte en las mesas de Prosecco.
El restaurante está dentro de Oasis Coyoacán, si no lo encuentras pregunta por él, se ubica al fondo de la zona de restaurantes de la plaza frente a una fuente que brinda armonía con el tintineo del agua a los comensales que desean comer en la terraza.
La magia de este lugar comienza cuando al entrar el bullicio típico de una plaza comercial se queda afuera, su diseño de interior ofrece detalles rústicos, con toques de elegancia y al mismo tiempo tan acogedor que te invita a una larga sobremesa.
Para ir abriendo el apetito mi recomendación es el pulpo con papas, créeme que no te arrepentirás; las bolitas de parmesano y el carpacho de portobello también son muy solicitados. Sus ensaladas son definitivamente un plus que no debes dejar pasar, yo probé la de alcachofa con parmesano y quería que el tiempo se detuviera en ese momento.
Los risottos son imperdibles, además de su variedad e ingredientes frescos que los acompañan, la cocción es perfecta, su textura en la boca te hace disfrutar del producto de forma natural, yo probé el funghi, con hongo portobello, setas, champiñones blancos, porcini y un toque de aceite de trufa, este último detalle le aporta una explosión de sabor.
También hay sopas, paninis y como buen restaurante de cocina tradicional italiana no pueden faltar las pastas, los ravioles de langosta en salsa roja y el pappardelle de jabalí son una verdadera locura para el paladar.
Al fono puedes observar desde lejos el horno de leña con colores brillantes y un interior ardiente, ahí se preparan pastas como la quattro formaggi, la salmone o fiorentina; en fin, su variedad ofrece satisfacción a todos los gustos.
Para que te quedes con un dulce sabor de boca ordena de postre el tiramisú, la pavlova con coulis de frambuesas, el calzone de plátano o fresa con nutella, cualquiera es excepcional.
Por último su atractiva barra no nada más luce bonita por fuera, disfrútala con una de sus bebidas típicas italianas, como un negroni o un apperol spritz. Además, cuentan con una cava de vinos con una amplia variedad de etiquetas de denominación italianos, chilenos, mexicanos, españoles, argentinos y franceses.
Dirección: Av. Miguel Ángel de Quevedo 227, Oxtopulco, Coyoacán.